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San Publicito y Santa Publicita. La publicidad también tiene su día

San Publicito viene a ser a la publicidad lo que San José al Día del Padre, y es que, la publicidad también tiene su festividad marcada en el calendario.

Aunque pueda parecer una tontería, es una costumbre muy nuestra utilizar un santo o patrón para cada día del año. San Publicito es el nombre elegido para el caso de la publicidad.

Cada enero venerarás a San Publicito

O al menos, deberías si tienes una agencia de comunicación. En concreto, el día elegido para tal celebración es el 25 de enero de cada año, también conocido como el Día de la Publicidad y el de San Publicito y Santa Publicita.

Otra costumbre española es que las fiestas no se pisen, con lo que según el convenio colectivo vigente en nuestro país para las empresas de publicidad, su celebración ha de llevarse a cabo en viernes, quedando trasladada al primer viernes laborable posterior a dicha fecha, o dicho de otra forma, el último viernes de enero.

Origen de la fiesta

Por la red circulan numerosas historietas o «leyendas» sobre un becario llamado Publicito al que le ocurren toda serie de desgracias. Son fábulas graciosas porque la fiesta en sí es una coña marinera.

El verdadero origen detrás de la fiesta de San Publicito tiene un trasfondo más religioso: se eligió como patrón el día de San Pablo Apóstol, porque fue uno de los apóstoles que predicó la palabra de Dios con mayor fervor.

Al comienzo solo la practicaban los publicistas, pero en la práctica ha pasado un poco como la celebración de Halloween, y hoy en día la fiesta de San Publicito y Santa Publicita es recordada por todas las personas que trabajan en el sector digital: tecnologías de la información, marketing y comunicación, etcétera.

La primera vez que vimos a este particular «santo» fue gracias a una campaña muy original obra de la agencia Peanuts&Monkeys. Santa Publicita, por su parte, es una iniciativa de la agencia Grow para dar visibilidad a la mujer con una patrona para este día.

Así que recordad: el último viernes de enero, Día de la Publicidad, cerrad vuestros iMacs y a tomar un vermut con los compis.

José María

Ingeniero de formación, es un apasionado de pantallas, teclas, códigos, matemáticas y jeroglíficos varios; cuenta con un enfermizo síndrome obsesivo-compulsivo por el detalle y el trabajo bien hecho.